Pasamos gran parte de nuestra vida aprendiendo, adquiriendo conocimientos y desarrollando distintas habilidades desde que somos pequeños, y este proceso no debe interrumpirse nunca.

En un mundo cambiante, lleno de novedades y nuevos retos personales y profesionales. El Lifelong Learning o formación permanente toma por ello cada vez toma más fuerza en todos los ámbitos profesionales, y apunta más allá de la mera adquisición de diplomas, persiguiendo cada vez más una formación duradera y aplicable.

Como profesionales, cada día nos acercamos a nuevos retos, cambios en las estrategias, en las herramientas en los procesos, que nos empujan a buscar una formación no solo académica, sino de tipo funcional, que nos lleve a desarrollar aptitudes necesarias para nuestro quehacer diario.

►Certificado de Profesionalidad Docencia de la Formación Profesional para el empleo►

En esta realidad, a veces olvidamos que la formación debe ir más allá de la obtención de título, y que lo realmente beneficioso es la obtención de nuevas herramientas y su aplicación en nuestro campo de actuación, sea cual sea. Por ello, debemos recuperar la sensación de disfrutar aprendiendo, y elegir por tanto una formación adecuada a nuestros gustos y teniendo en cuenta nuestras preferencias, y pensar más allá de nuestras necesidades, ya que una formación que no se disfruta, puede dar al traste con nuestras expectativas.

Es importante recuperar nuestro espíritu investigador, la curiosidad, y la dedicación, para mirar la materia a la que nos enfrentamos con ojos de niño y trabajar los contenidos de una forma eficaz, porque cuando se hace así, aprender es fácil, y el título llega solo. Además, aprender disfrutando tiene algunas ventajas que todos conocemos, pero si las has olvidado, te las cuento aquí:

• Cuando eliges una formación que te apasiona, estás totalmente dispuesto a aprender, aprovecharás por tanto mucho más la información.

• La creatividad aumenta, experimentas y adquieres conocimientos prácticos.

• Te haces preguntas e investigas hasta responderlas.

• Pones toda tu atención en el aprendizaje porque te hace disfrutar.

• Te sientes motivado porque no encuentras dificultades insalvables. Hay conceptos complejos, pero los superas.

• Todo te resulta más fácil.

Como consejo último, a la hora de elegir una formación que te resulte fácil, ten en cuenta estas razones a la hora de elegir la materia, y recuerda también elegir una formación adecuada, como te recomendábamos en este artículo hace unas semanas.